Una vez que he llegado nuevamente a mis dominios, me dirijo a mis jardines, necesito relajarme... la verdad no hay nada que deteste más que perder el tiempo, me pregunto una y otra vez dónde habrá llevado Láquesis a mi padre, pero la verdad eso tampoco ahora es de mi total interés... observo la elegancia de mi jardín, inspiro el aire que inunda el lugar, tan lleno de fragancias agradables... camino lentamente por el lugar, mi tridente nuevamente está descansando en dónde le corresponde... tomo asiento en la escalinata del lugar, concentro mi atención en la fuente frente a mí...
¡Una guerra... no hay muchas cosas hermosas durante una guerra! - susurro...